Llegara
un momento en este relato que creerás estar leyendo tu propia historia.
Si has leído AMOR ZERO de Iñaqui Piñuel entonces sabrás con que te vas a
encontrar, si aún no lo has leído, te sugiero lo hagas, porque es lo único que
te va a salvar de las garras de un Psicópata Emocional como los que me tocaron a mi.
Soy una victima de amor zero, porque jamás fue sincero ese amor
que creí me daban. Nunca hubo amor de su parte.
Esta es mi propia historia.
¿Como es posible haber caído en varias relaciones con psicópatas narcisistas?
No es ser demalas, no es estar salado, no es que me encantaran los hombres que me maltrataban, ni mucho menos era una boba o ingenua, sencillamente, cumplía todas las características para ser la presa perfecta para un abusador emocional, un psicópata integrado: Empática, amable, amante de los animales y la naturaleza, Terapeuta Holística, Locutora y Periodista, amiga de todo el mundo, alegre, escritora, compositora, bloguera y enamorada del amor.
Al primero lo conocí en 1984 a la edad de 17 años, padre de mi hija, un hombre encantador, ingeniero de sonido en una emisora local, donde yo fui a realizar mis prácticas de locución y producción de medios audiovisuales, carrera que cursaba.
Desde el primer momento fue amor a primer vista, durante los 12 años que duró nuestra relación viví momentos muy lindos pero también momentos muy angustiosos. Me fui a vivir con él en el año 1988 y ese paraíso con el que yo soñaba se convirtió en el mismísimo infierno.
Este hombre me maltrataba física y emocionalmente, me alejó de mis padres y familia, de amigos, me acusaba de serle infiel todo el tiempo, no aceptaba que estudiara o que trabajara, queria controlarme todo el tiempo, que no saliera de la casa, intentó matarme en 2 ocasiones, la primera vez lleno de ira me lanzó un televisor a la cabeza, yo estaba acostada leyendo y logré girarme para un lado y me lastimó las costillas, una de ellas fracturada. La segunda vez en 1990 con 6 meses de embarazó, entró a la casa, desenfundó un arma y me disparó a la cabeza, yo logré agacharme unos centímetros y el tiro se incrustó en la pared, él salió de la casa huyendo, mis padres en ese momento llegaban a cenar y me encontraron totalmente petrificada, llena de miedo y muy adolorida, pues mi hija se había enredado en el cordón umbilical, fui llevada de urgencia a la clínica, mi padre quiso denunciarlo pero yo le rogué que no lo hiciera. Los tres meses que me faltaban para terminar el embrazo lo pasé en el hospital y en la casa de mis padres. Este sujeto logró convencerme que lo dejara estar conmigo para cuando naciera mi hija y yo lo permití, fueron los 3 meses más amargos de mi vida, cuando la niña nació, no permitía que mis padres la alzaran, no quería que nadie la tocara, ni yo. A los 8 días de nacer me obligó a ir a la notaria a registrarla con sus apellidos aprovechando que mis padres habian salido y amenazándome que sino lo hacia mataba a mi papá. Al cumplir mi hija un mes de nacida, lo saqué de la casa, le empaqué sus cosas en bolsas de basura y las envié en un taxi a casa de su hermana, con mis papás nos cambiamos de casa, pero cuando me reintegré al trabajo, allá fue y me encontró, durante un año nos la pasamos negociando las visitas a la niña, cumplía con la cuota alimentaria, pero cada que veía a la niña la tomaba en brazos y me amenazaba con quitarmela y en varias ocasiones tuve que llamar a la policía, para lograr que la soltara y me la devolviera. Sin decirle nada, con mis padres planeamos huir de la ciudad a otra y pedí traslado de cuidad en mi trabajo, me lo concedieron, yo me fui sola a la nueva ciudad y mis padres con mi hija a otra. A los dos años de estar yo en la nueva ciudad, este hombre una tarde cualquiera que yo salia de la oficina estaba parado afuera esperándome, ese día me llene de terror y llame a la policía, dijo ir en son de paz, me pido hiciéramos un acuerdo y él visitaría a la niña solo dos veces al año y se haría cargo de los gastos de manutención. Ninguna de las dos cosas las cumplió. Se aparecia cualquier dia sin avisar y no daba el dinero que le exigía la juez de familia. Así fue hasta cuando mi hija cumplió los 6 años. Esto era una pesadilla permanente, yo ya estaba desesperada, no podía rehacer mi vida porque siempre estaba él ahí para molestar y amenazarme. En una de mis oraciones le pedía al creador que hiciera algo, que yo solo podría descansar si el moría o yo moría pero no quería seguir más en esta situación, que yo ya no podía más seguir viviendo así. Que no quería seguir viviendo un infierno. Para el mes de septiembre de 1995 él llegó a visitar a mi hija por su cumpleaños No. 5, llegó haciendo mil promesas y pidiéndome que regresaramos a vivir juntos, que él quería estar con nosotras, obviamente yo no acepté, lo noté muy pálido, flaco y desmejorado. Me rogó en varias ocasiones que lo aceptara de regreso y yo no lo hice, sabia que él no cambiaría y que mi inferno iba a ser para siempre, además me enteré que tenia otros hijos. Durante ese año nos comunicamos muy poco, no regresó más a ver a la niña y en el mes de octubre de 1996 falleció de leucemia y una neumonía. Ese día lloré tanto y asi durante 6 meses, me sentía tan culpable pues yo había deseado con tantas fuerzas su muerte o la mía que se había cumplido, pero después de llorarlo tanto me di cuenta que por fin ese infierno había terminado.
Eso creía yo, durante los dos años siguientes conoci otros hombres que tenían rasgos comunes, muy encantadores al comienzo y muy crueles al final, se repetía la historia una y otra vez. Pero yo sin saber nada sobre ese rasgo de personalidad, huía y trataba de protegerme.
Cuando decidí que me quedaría para vestir santos, solo dedicada a mi hija y a mi trabajo, conocí a quien hoy es mi esposo. Un hombre adorable, sin rasgos psicópatas ni narcisistas, un hombre normal. Que en muchas ocasiones me parecía un hombre aburrido, pues no manejaba la adrenalina de los anteriores, ni existía ese bombardeo de amor todo el tiempo, era un hombre normal, cariñoso, comprensivo, atento, dedicado a su trabajo y a su familia. Estando ya casados a los dos años me descubrieron cáncer uterino por VPH, después de todas las investigaciones y exámenes se confirmó que me lo había transmitido el sujeto fallecido, estuve al borde de la muerte , no entendemos como pudo resultar así cuando las citologías realizadas desde el ultimo encuentro con él y el diagnóstico habían salido negativas, no era posible que me lo hubiese contagiado alguien más pues tomé precauciones con los otros dos personajes. El cáncer avanzó tan rápido que cuando intentamos comenzar el tratamiento ya no había opción. Era un cáncer invasivo solo con un 50% de posibilidades de sobrevivir mediante una cirugía. Me la realizaron, se me complicó, tuve un paro cardiorespiratorio, estuve 2 meses hospitalizada sin ninguna esperanza de vida, lo único que me mantenía respirando era pensar en mi hija. En dejarla tan chiquita y sola. Un dia que ya no recuerdo la fecha, me levanté de la cama, con gran esfuerzo comencé a caminar, pesaba 39 kilos y tomé la decisión de vivir, sin importarme que tuviera que hacer, pero tenia que vivir. El ex psicópata fallecido no me iba a llevar con él, seria su triunfo y yo no podía permitirlo. Ese día comencé a luchar por mi vida, la recuperación tardó casi un año pero lo logré, hoy 16 años después estoy totalmente recuperada del cáncer, gracias a los cuidados de los médicos, de mi madre, mi esposo, el amor de mi hija y mi fé en la divinidad.
Pero cuando uno menos lo espera aparece de nuevo un depredador, cuando más feliz eres y cuando más tranquila estás.
Mi esposo trabaja en otra ciudad y solo nos vemos cada 2 o 3 meses, la distancia y nuestra vida íntima que ya no existe, fue el plato perfecto servido en la mesa del nuevo depredador.
Al nuevo sujeto lo
conocí un 1 de septiembre de 2016, en un Centro Comercial, me
abordó de una manera extraña, yo ingresaba por una de las puertas y se me
acercó y me dijo:
-
Disculpa, creo que te conozco
Yo
lo miré y me di cuenta que jamás lo había visto en mi vida y le respondí:
-
Lo siento creo que estas equivocado.
prosiguió:
-
No, de hecho estoy seguro que nos conocemos, no se tal vez en la Universidad
-
No, que pena creo que estas equivocado de persona, lo siento tengo afán debo
cumplir una cita con un cliente en 5 minutos - le respondí
Pero
siguió insistiendo en que me conocía, nombró a su Universidad, le dije que yo
no había estudiado allí, es más, le dije que había estudiado en otra ciudad,
pero seguía insistiendo en decir que me conocía. Le dije: - Tal vez me parezco
a alguien, a lo que respondió: No creo, tu eres única.
Yo
realmente tenia mucho afán, pero ya este sujeto había logrado robar mi atención
y como tenia tanto afán solo le pregunté su nombre y le entregué una de mis
tarjetas de presentación, le dije:- Mira este es mi número de celular de pronto
en otra oportunidad podamos hablar. Y me fui.
Pasaron
2 días y yo me había olvidado de ese encuentro.
Era
sábado 1 pm, me encontraba con una amiga en un hotel de la ciudad, con
intenciones de participar de una conferencia que dictaría uno de los hombres
con mas carisma en este mundo, periodista, escritor, conferencista y motivador.
Estábamos
inscribiéndonos para participar cuando mi teléfono celular sonó, era un número
para mi desconocido.
-Alo?
-Hola
como estás, te habla Julián XXXX (omito sus apellidos, aunque
desearía ponerlo en evidencia y evitarle dolor a tantas mujeres que
cayeron y caerán en sus garras) me recuerdas? nos conocimos hace 2 días en
XXXXX
-
Si, hola, claro como estás?
-
Muy bien linda y tu?
-
Yo muy bien gracias.
-
Te llamo porque me gustaría invitarte a salir hoy, es posible?
-
Que lindo, gracias. Mira, estoy en este momento a punto de ingresar a una
conferencia y me desocupo a las 9 pm, yo creo que seria en otra oportunidad.
-No,
me parece bien las 9 pm, en donde te encuentras?
-Estoy
en el Hotel XXXX
-
Verdad? ese hotel es a 2 cuadras del apartamento de mis padres, yo estoy aquí,
muy cerca de ti.
-
Que coincidencia, bueno si deseas nos vemos cuando yo salga y tomamos algo
-
Si claro hermosa, me avisas y te recojo.
-
Ok entonces así quedamos.
Yo
ingresé al evento y terminamos como a las 9 pm y ya él me estaba llamando muy
interesado en que nos viéramos.
Le
pedí a mi amiga que me acompañara mientras él llegaba y así fue, él apareció
pulcramente vestido, debo decir que no es para nada atractivo, pero su
amabilidad, su carisma, su mirada, hacía que se me olvidara su poca gracia.
Y
pensé: - Bueno, lo hermoso se debe buscar en el alma - (Y ahí empecé yo a
caer en este juego).
Llegó,
me saludó muy amablemente con un beso en la mejilla, despedimos a mi amiga en
un taxi y le dije que debía ir a ver mi auto que estaba parqueado en la
calle a la vuelta del hotel. Caminamos hasta allí y le pedí al señor
que estaba vigilando los carros, que lo recogería en una hora y que por
favor me lo siguiera cuidando.
Fuimos
a un café bar, allí cerca, 2 calles, es una zona de bares y pubs. No
quise aceptarle invitación a cenar, le dije que solo me tomaría una
limonada y nada más. Yo sentía algo de desconfianza, pues aun se me hacia
extraña la forma en que él me había abordado en aquel centro comercial.
Conversamos
un rato, me contó algunas cosas sobre él, nada trascendental, igual yo le
conté algunas cosas mías, y llegando las 10 pm le dije que
debía marcharme y salimos del bar.
Me
acompañó a donde estaba mi auto, me ofrecí amablemente acercarlo al
apartamento de sus padres para recoger el suyo. Me tomó de mi mano para caminar
y hubo un momento en el que él me frenó y me abrazó, yo sentí ese abrazo
cariñoso, cálido y lo correspondí. Llegamos afuera del edificio, estuvimos
allí unos 15 minutos hablando dentro del auto, se me acercó, me dio un
ligero beso y luego se bajó y me indicó cual era su auto, se despidió del
portero y se subió a su auto. Yo arranque y partí hacia mi casa. Noté
que él me seguía pues llevábamos la misma ruta. En cierto punto yo me
desvié y él siguió su camino. (Meses más tarde yo entraría a ese
edificio y conocería a sus padres, una pareja muy peculiar)
A
los 20 minutos aproximadamente, ya me estaba escribiendo y pidiéndome que
le recibiera una llamada, pues deseaba hablar conmigo.
Me
dijo que estaba encantado de conocerme, que yo era una mujer maravillosa, me
llenó de elogios y palabras cariñosas y bonitas y yo me las creí.
Sentí que estaba conociendo a alguien que por fin iba a
valorarme. (Cabe destacar que mis relaciones
amorosas siempre fueron un desastre, pero eso es tema para otro
blog).
Hablamos
un buen rato por teléfono y nos despedimos.
Al
otro día (sábado), ya estaba escribiéndome por el whatsapp varias veces al día y me
propuso que al siguiente día fuéramos a cenar.
Era
domingo 7 pm, llegué a su edificio a recogerlo, es muy cerca a mi casa, en el
sur de la ciudad y nos fuimos en mi auto rumbo al restaurante que deseaba que
yo conociera. Es un sitio hermoso, bello y finamente decorado, muy elegante. Un
lugar al que yo difícilmente podría acceder por sus precios altos.
Pero él no, pues estaba acostumbrado a pertenecer a clubes y a frecuentar los
sitios mas finos y costosos de la ciudad.
Yo
sentí que había agarrado el cielo con las dos manos.
Entré
y quedé deslumbrada. En realidad es un sitio muy hermoso. Hablamos muchas
cosas, me contó sobre su familia y yo le conté sobre la mía.
Cenamos
allí, no recuerdo que pedí para comer, pero estaba delicioso.
Cuando
salimos de aquel lugar eran las 10 pm. Me pidió que aceptara conocer su
apartamento, quería mostrarme unos cuadros que había comprado.
La conversación de esa noche en el restaurante había sido de familias y
decoración. Cuadros, muebles adornos. Yo realmente nunca le he puesto
interés a ese tema, para mi son cosas banales, pero vi que para él era una
pasión y me interesé en lo que me contaba.
(Con
el tiempo descubriría que es un obsesivo compulsivo por las compras,
durante un año de relación, cambió 3 veces la decoración total de su
apartamento incluidos muebles, adornos y cuadros y su único tema de
conversación era ese. Todo el día me enviaba fotos que tomaba en almacenes, a
eso se dedicaba, poco trabajo pero mucha compra).
En
el trayecto de regreso a su apto me pidió que entráramos al supermercado a
comprar algunas cervezas y cuando estábamos allí, me tomó en sus brazos y
me dijo: - Linda, quiero que seas mi novia, me gustas mucho y cuando te vi,
sentí que eres la mujer que he estado esperando desde hace mucho
tiempo. (Y yo de bruta le creí).
Me
quedé mirándolo y le dije que él me parecía también muy interesante,
que lo intentáramos. (Yo venia con muchos vacíos emocionales y
deseaba encontrar esa persona que me ayudara a llenar esos vacíos, no
entendía que el problema no eran los vacíos, el problema era yo y mi baja
autoestima, todo eso lo vine a entender tiempo después).
Y
me dijo: Hermosa, hoy quiero hacerte el amor, por favor no me digas que no, si
no lo hacemos hoy, siento que te perdería, yo deseo mucho estar contigo, que
pactemos nuestro amor de esta manera, dime por favor que si.
Yo
me negué en un principio, le dije que no, que más adelante, que no me
sentía preparada, que me diera tiempo y el seguía y
seguía insistiendo. Yo le había comentado en el restaurante que
debido a una enfermedad que yo padecía en ese momento, todo mi deseo
sexual se había ido a cero y que yo llevaba mucho tiempo sin deseos y no
sentía ganas de estar con nadie. Y él me seguía insistiendo y
diciéndome que él me ayudaría a superar eso, que él haría que yo
volviera a sentir y que me tendría paciencia, que lo único que le
importaba era yo y que todo iba a estar bien.
A
estas alturas de la conversación yo ya pensaba que podría ser positivo
para mi volver a tener sexo, pues llevaba mucho tiempo sin tenerlo y que de
pronto él de verdad me ayudaría a superar esa falta de deseo. Así que
acepté, más como terapia, y no por que lo deseara realmente.
Llegamos
a su apartamento, con las cervezas, los preservativos y esas ganas
incontenibles de aquel sujeto, que no me quería dejar ir a mi casa sin
antes pasarme por su cama.
Debo
decir sin entrar en detalles, que esa noche volvi a vivir, ese hombre sabia
exactamente donde y como tocarme y hacer que yo estallara de placer. Fue
mágico. (Ahí ya me enganche con el tipo en cuestión).
Me
causó curiosidad y se lo hice saber, el porque usaba doble preservativo, uno
sobre otro y se lo cambiaba a mitad de la relación, me dijo que
siempre desde hacia 16 años lo hacia para protegerse. (En
algún momento por mi cabeza se cruzó la frase: será que este hombre se
acuesta con cualquiera y por eso tanta protección).
A
partir de ese día este hombre me llenó de amor, mimos, frases hermosas,
detalles, salidas, cenas, besos, abrazos y todo el amor que yo siempre
había deseado recibir y claro está mucho sexo, porque parecía una
maquina sexual. Creo que teníamos sexo día de por medio y en algunas
ocasiones todos los días. También fue controlador y obsesivo con los mensajes
por whatsapp. Sino le respondía de inmediato me
bombardeaba de mensajes repetidos hasta que yo respondiera.
Su
rendimiento sexual no crean que era el de un actor porno, aguantaba mucho
tiempo pero con pausas, se cansaba mucho. Descubrí en una ocasión que
tomaba unas pastillas chinas, se las encontré y le pregunté y se me iba como
enojando pero finalmente me dijo que las tomaba para poder durar mas. Realmente
duraba eternidades pero no era el mejor sexo del mundo. Pocas veces eyaculó
dentro de mi, el 95% de las veces en un año de relación había masturbación
asistida, es decir yo lo acariciaba, le hablaba, lo motivaba y él se masturbaba
hasta llegar al orgasmo.
No
es el amante perfecto ni ideal, pero yo ya me estaba enamorando de sus detalles
y me tenia totalmente enganchada. Ya en poco tiempo yo había logrado que
no usara doble preservativo sino uno solo, pero jamás tuvimos segundo round,
era una sola vez y yo para mi casa.
La
relación marchaba bien, había mucha constancia de hablar en el día, y
vernos, salir a cenar, en fin, sentía que tenia una relación como yo la
deseaba con alguien que me quería.
A
los pocos días tuvimos nuestro primer altercado, pues yo ya estaba aburrida de
lo mono temático, solo hablaba de cuadros, adornos y muebles, yo le pregunté en
alguna ocasión sino le gustaba leer, pues yo si soy adicta a la lectura y me
gusta hacerlo para crecer espiritual e intelectualmente. Me dijo que no mucho,
que en la iglesia (ahí me enteré que frecuentaba una iglesia
cristiana) le habían prestado unos libros pero que no los
había terminado de leer, no le habían gustado. Ese día me
di cuenta que al hombre jamás le había gustado la lectura y que en su
cerebro había muchas neuronas sin estrenar. Ese día le dije que mejor
buscara otra mujer mas parecida a él, que la verdad yo ya me estaba aburriendo
de siempre hablar de lo mismo. Duramos unos 8 días sin hablarnos y me
volvió a buscar diciéndome que me extrañaba que le hacia mucha falta, que
volviéramos. (Y yo volví a caer)
No
llevábamos ni un mes cuando ya me dijo que me amaba, y eran constante los
TE AMO en nuestras conversaciones, pues yo también me sentía muy enamorada
de él, a pesar de aburrirme en algunas ocasiones. Pero me gustaba su
compañía y lo hermoso que me trataba.
Duramos
15 días bien hasta que surgió otro inconveniente y nos volvimos a separar
otros días y así sucesivamente volvíamos y terminábamos, en un
total de 7 veces en un año.
Algo
que si comenzó a suceder es que inicié siendo su novia, pero cada vez que
terminábamos y volvíamos yo regresaba, pero en otro escalafón mas
abajo, ya no era su novia. Yo se lo decía, que me estaba degradando, que cada
vez yo era menos en su vida y él para mi lo era todo.
En
el mes de diciembre conoció a una de mis mejores amigas, él insistió en que la
llevara a presentársela a su apartamento, así que fuimos, pero yo ya le
había advertido a ella como era él de obsesivo con el orden, que allá todo
era como él dijera, que no se sorprendiera si hacia cosas raras. Si, el
definitivamente era obsesivo compulsivo, y además controlador. Yo a esos 3 meses de
conocerlo había cambiado mucho, había dejado de ser quien soy para ser
quien él quería que fuera, había cambiado mi esencia y mi amiga me lo
hacia ver todos los días y yo no lo quería aceptar. Ese día que
la conoció, se armó la de Troya, pues el comenzó a decir cosas sobre mi de
muy mal gusto a lo que mi amiga le refutó y yo al calor de unas cervezas
también me comencé a defender. Mi amiga le dijo: - Mira Julián ella ha hecho
muchas cosas por ti, porque me consta, ha cambiado su esencia para ser como tu
deseas que sea, ella siempre corre a verte cuando la llamas, ella siempre está
para ti, ha hecho mucho por ti y tu que has hecho por ella? y ahí su cara
cambió de expresión, se enojó y a esas alturas yo preferí que nosotras
saliéramos de ese lugar, antes que se formara una discusión mas fuerte. Yo
no lo quería perder a él, pero tampoco a mi amiga.
Ese
día me di cuenta que él me tenia en sus manos, yo había dejado de ser
yo, por ser la mujer que él deseaba que fuera.
Cuando
llegué a mi casa me llamó y discutimos, estaba muy enojado porque mi amiga lo
había confrontado, estaba furioso, ese día dejamos de vernos como 5
días, hasta que de nuevo volvimos.
Y
así sucesivamente volvíamos y terminábamos, pero cada vez yo era
menos en su vida, ya no habían salidas a comer, ya solo nos
veíamos en su apartamento, muchas veces yo llevaba las bebidas y la comida
por su encargo y jamás me devolvió el dinero de la compra. Muchas veces eso era
lo único que yo tenia en la billetera y no le importaba dejarme así, sin
un peso. Ya cada gasto iba era por mitad, ya no me llamaba como antes, ya no
era su amor, ya no me decía te amo y lo peor yo ya sospechaba que se
estaba hablando o viendo con alguien más.
Cada
vez que nos ausentábamos yo sabia que él ya estaba en busca de alguien
más.
Solía y
suele frecuentar los centros comerciales de la ciudad, se va solo, me
decía algunas veces que estaba con sus padres pero yo sabia que mentía,
otras decía que iba a cine solo, jamás vimos una película juntos.
Tiene un closet con mas de mil películas y jamas me dijo que viéramos alguna.
Alguna
vez enojada le dije: - Eso que tu hiciste conmigo de abordarme así en el
centro comercial, no es la primera vez que lo haces, ya lo has hecho, y él solo
me miraba y se sonreía.
Muchas
de las veces que terminamos yo fui la responsable, me hartaba la situación, y
lo cortaba, pero enloquecía lejos de él y volvía a buscarlo, muchas
veces le rogué, le lloré, me humillé para que volviera conmigo, yo ya
había perdido mi autoestima, mi amor propio, mi dignidad.
Para
navidad me hizo un regalo, fuimos a un almacén y me compro 2 blusas hermosas,
que me encantaban, pero no era gratis, me pidió que le regalara 100 dolares que le faltaban para comprarse un
cuadro y yo como era navidad, se los di. (Ese dinero que le di me abrió
un cráter en mi economía, pero no me importó, yo lo amaba)
Para
mi cumpleaños no hubo nada, ni un detalle, ni una rosa, nada, a cambio de eso
me vendió dos cuadros (según él en un precio irrisorio para ser para mi, y que
ese descuento era mi regalo de cumpleaños), y yo como una idiota caí, (él
solo necesitaba deshacerse de esos cuadros para su nueva remodelación, ya
había hecho una desde que me conoció y continuamente cambiaba adornos).
Conocí a sus padres un día que me pidió le ayudara a resolver unos
exámenes, que la compañía donde trabajaba le exigía para certificarlo
un año más en su labor. Así que fui y los conocí. Ya ellos
sabían que salíamos, él me nombraba en sus llamadas telefónicas. vale
destacar que cuando estábamos juntos sus padres lo llamaban unas 15 veces
al día. Controladores al 200%. Querían saber todo el tiempo que hacia, a
donde íbamos, que estábamos haciendo. Un hombre de 51 años controlado por
una pareja de padres de 80 años que creen que aún tienen a un bebé, al que le
acolitan sus compras obsesivas compulsivas, al que tratan como si fuera un
desvalido o un retrasado mental.
Ese día debíamos trabajar en el computador. Él no tiene ni pc ni
internet en su apartamento, pues dice que no le gusta, pero en casa de sus
padres él se conecta y hace todo lo que necesita en la web. Me había dicho
que no tenia redes sociales, yo lo busqué por todas ellas al estilo Sherlock Holmes y la verdad ni rastro de él
en la web. Pero cuando nos sentamos al pc, vi que tenia abierta la página
principal de facebook, me pregunté que hacia en esa
pagina si no tenia perfil. Me quedó siempre esa duda. (Tal vez ahora caigo
en cuenta que tiene un perfil falso por donde conoce mujeres).
Ese mismo día entré al baño y vi su celular conectado cargando la batería,
no quise mirarlo, debí hacerlo, así habría descubierto muy
temprano con que sujeto me había involucrado y me habría ahorrado
tantas lágrimas.
Pasaron los meses entre ires y venires y como les contaba antes, la
relación se desquebrajaba aún más.
Un día domingo ya no recuerdo de que mes, me dijo que en el Club sus
padres se habían enterado que yo estaba casada (él sabia que estaba
casada) y que por esa razón sus padres le
habían prohibido volverme a ver y que debíamos terminar, pues él no
le quería llevar la contraria a sus papitos que están tan ancianos.
Esa noche le lloré lo que no se imaginan, le supliqué, le pedí de todas
las maneras que no me dejara. (No puedo creer ahora esa dependencia
emocional tan inmensa que se creó hacia él que tanto daño me ha hecho).
Dejamos de vernos mas de una semana y sufrí lo que no he sufrido,
sentía que moría sin él, sentía que no podía respirar. No
dormía, no comía, no tenia vida.
De tanto rogarle accedió a seguir, pero ya no era su novia, era una amiga con
derechos. (y no muchos derechos. claro está)
Y así proseguimos unos meses más, peleando, volviendo una y otra vez.
Hace 3 meses descubrí que se veía con una mujer. Me dijo que en una
de las separaciones que habíamos tenido había conocido a una fiscal
que asiste a la iglesia cristiana donde él asiste, se llama Rey de
Reyes. (Descubrí también que no asiste a la iglesia porque desee crecer
espiritualmente, ni porque crea que va a acercarse a Dios, lo hace porque
allí conoce mujeres con el perfil que le gusta: profesionales y con
dinero, ademas de susceptibles emocionalmente).
Me decía que le había vendido varios objetos de decoración y que por
eso se veía con ella, pero yo sospechaba que había algo más. En
alguna ocasión que yo estaba en su apartamento su mamá llamó y le preguntó
con quien estaba y el le dijo que estaba con Olga Lucia, obviamente no soy yo,
era la mujer en cuestión. Me di cuenta que ya sus padres sabían que estaba
saliendo con ella y en alguna ocasión escuche que la mamá le preguntaba: Ud
está con XXX (o sea yo) él le decía: No mamá yo nunca más me volví a ver
con ella. (En esas ocasiones me sentí de lo peor).
Continuamente me decía que sus ex lo buscaban, mientras
estábamos juntos su teléfono no dejaba de sonar, su whatsapp sonaba todo el tiempo y él no lo
respondía, muchas veces quise tomar en mis manos ese teléfono y salir a
correr para ver que ocultaba. Lo dejaba en el baño o en otra
habitación, (se ahora después de leer AMOR ZERO, que él hacia todo
eso para provocarme, porque un psicópata emocional solo busca destruir a su
pareja, a su victima, violar su alma, acabar con ella como sea y sin importar
sus sentimientos).
Un Psicópata emocional no ama a nadie, eso me ha quedado muy claro ahora.
Muchas veces supe que me mentía, habían muchas cosas que no cuadraban en
sus versiones, en cosas que hacia, pero yo estaba ciega, no quería ver la
realidad.
Mi amiga, la que él conoció siempre me dijo: - Él solo te quiere por sexo, por
nada más, aléjate, ámate, date tu lugar. Pero yo estaba enamorada de ese hombre
que existía al comienzo, el cariñoso, el amable, el que decía amarme.
Ese hombre jamás volví a ver. Yo le pedía que volviéramos a ser
la pareja de novios del comienzo, que todo era hermoso al principio que
volviéramos a ello y él me respondía: - Eso es muy difícil, ya no podemos
volver a lo del principio-.
Ya su desinterés por mi era notorio, una noche me quedé a dormir con él y
en toda la noche no se me acercó a abrazarme, yo moría de frío y
agarré una sábana y me envolví en ella, pero seguía temblando de
frío. A eso de las 4 de la madrugada se levantó, abrió el closet y sacó
una cobija (yo ingenuamente pensé que nos arroparíamos) pero no,
se envolvió él en la cobija, me ignoró a pesar de decirle que tenia frío y
me estaban dando calambres en los pies, no le importó. Tan pronto amaneció, me
levanté, me vestí y salí de ahí, no quería estar un minuto más
bajo esa humillación. Pero me alejaba y a los pocos días yo misma
terminaba rogándole vernos. En otras ocasiones él era quien me buscaba, me pedía vernos y obviamente el tema era sexo, no le interesaba nada más. Para obtenerlo me llenaba de palabras cariñosas (como al comienzo), y yo regresaba con él ilusionada en que todo iba a ser como al principio, que por fin había recapacitado y volvería a ser su amor, su único amor. (Y yo seguía cayendo mas bajo).
Hace un mes y medio me dijo que sus padres querían que él se casara y que
le estaban organizando matrimonio con una prima en segundo grado, que él se iba
a dar esa oportunidad y que lo nuestro jamás volvería a ser como antes.
Que me pedía no alejarme, estar con él mientras definía que hacer.
Porque yo era muy importante para él y me quería mucho. Que
ella vivía en otra ciudad, pero vendría a verlo. Yo ese día le
hablé desde mi corazón, le dije que eso no estaba bien, que él estaba muy viejo
para hacer lo que sus papás dijeran. Que por favor no cometiera ese error de
casarse con alguien que no amaba. Que arregláramos las cosas, que si era
preciso yo me divorciaba para poderme casar con él, que nos diéramos una
oportunidad. (Pero a él yo no le interesaba ya). Ese
día después de tener sexo (ya por obvias razones no diré que
hacíamos el amor), me dijo que si podía hacerle el favor de irme,
porque tenia que hacer una llamada a sus padres para hablar de ese tema y no
quería que yo estuviera ahí. No le creí una sola palabra, sabia que tenia
que devolver las llamadas insistentes de una mujer que estuvo llamando muchas
veces mientras teníamos sexo. Una humillación más y yo
seguía ahí sin dignidad pegada a él. Me fui, pero con mucho dolor en
mi corazón.
La verdad es que durante varios días él no me llamaba, se alejaba
cada día más, yo le escribía por whatsapp y me ignoraba los mensajes o me contestaba cortante mucho rato después, no me respondía llamadas, ya no había ningún acercamiento.
Llevábamos unos 15 días asi, yo me moría por buscarlo,
pero muchas personas, terapeutas, libros me aconsejaba el contacto cero, no
buscarlo. Pero llegó su cumpleaños y no aguanté. Al final del día lo
llamé, lo felicité y me despedí. A los 3 días no aguanté y lo llamé. Le
dije que vendería los cuadros que le había comprado y que necesitaba unos
números telefónicos que el tenia de los artistas que los pintaron, que me servirían para vender
los cuadros. Me preguntó que acaso que iba a hacer y le dije que me
iría de la ciudad, que ya mi divorcio había salido y que aunque él no
lo había valorado, yo me iba a empezar de nuevo en otro sitio. (Realmente que me divorciara o no, le iba a importar un bledo.).
Me dijo que me quería mucho que yo tenia que entender que
había conocido a alguien y que estaba con ella. Que el tenia derecho a
buscar su felicidad. Le pregunté: - ¿Cómo así que conocí? ¿No que era con tu
prima? ¿Cual felicidad? Será la de tus padres!!! (claramente yo nunca
estuve en sus planes, su felicidad nunca fui yo) y ahí lo caché en la
mentira. Trató de salir de esa con miles de excusas y explicaciones pero
no pudo, no tenia argumentos válidos. Ahora se que siempre usó a sus
padres como una excusa para que yo no me hiciera ilusiones con él. No
había ninguna prima para casarse, era con la tal fiscal, que a estas
alturas dudo que sea una fiscal. Debe ser alguna incauta que abordó en un
centro comercial o en la iglesia. Porque lo que si tengo claro es que me llenó
de mentiras durante un año. Y finalizó diciéndome:
-Tu
y yo terminamos hace un año.
-Tuvimos
una relación un año, o sea que para ti no fuimos nada todo este tiempo?- Le
dije
-
(no respondió)
Pero
aun así, me pidió que fuera esa tarde a su apartamento que deseaba consentirme,
que me quería mucho y me deseaba mucho aún. (lo que quería era sexo
gratis)
Obviamente
me negué y fue la ultima vez que hablé con él. Ese día supe que era
el final, me dolió, lloré en la ducha hasta que me desintegré. No dormí,
sentí morir. Sin embargo aún quedaba algo en mi, por allá muy adentro que
me decía: "No te dejes destruir, vas a salir de esta". Hablé con una amiga, ella me escuchó y me hizo ver muchas cosas, que serian el comienzo de mi sanación. Le envié al ex un audio por whatsapp diciéndole muchas cosas, desenmascarándolo y nunca más me volví a comunicar con él. Dejó el mensaje en visto y nunca lo respondió.
Y
comencé a comprar libros on line, todo para superar una
pérdida. Me leí varios autores, seguí a varios gurus
por youtube, de como recuperarse de una
ruptura. Entré a varios grupos de RECUPERA A TU EX, pero allí leía historias muy similares a la mia, sabia que algo no estaba bien, que no eran relaciones normales y asi veia como cientos de personas compraban terapias online con estos personajes que no tenían ni la mas mínima intención de revelarles la verdad, decirles que su relación había sido con con un narcisista, nadie se lo decía. Pero solo hasta el día que leí en algún foro que
recomendaban AMOR ZERO, lo busqué, lo descargué y me lo leí en 2 días, por fin
descansé. Por fin entendí que era lo que me había pasado, que era lo
que estaba viviendo. Por cual infierno había atravesado y tuve claro como
iba a sanar. El libro parecía escrito como si hablara de él y de mi. Todas
las características del psicópata, él las tiene y todas las de la victima
las tengo yo. Temblaba leyendo el libro, no podía creer lo que leía, era
increíble tanta coincidencia. Lloré leyendo algunos capítulos. Asi que decidi escribir en esos grupos que antes les mencionaba, que leyeran este libro que buscaran mas información y sucedió lo que ya imaginaba, me expulsaron de varios, porque les iba a dañar el negocio.
Cuando termine de leer AMOR ZERO llegué a estas conclusiones:
Me
conquistó, me enamoró, me ilusionó, me engañó, me mintió, me utilizó, me explotó sexualmente, me fue infiel y
finalmente me abandonó. Todo esto sin una pizca de remordimiento.
Solo han pasado 8 días de haber leído AMOR ZERO y de terapiarme con videos, y consulta psicológica y aunque a veces a él
lo extraño, ya no me duele, ya hice conciencia que fui una victima más de un
psicópata emocional, un psicópata narcisista, de un enfermo. Yo no tuve la culpa de nada, me liberé
de mis culpas cuando entendí que solo fui una más que cayó en las garras de
este sujeto. Una persona perezosa para trabajar, que le gusta la vida
cómoda sin tener que hacer mucho esfuerzo. Gana bien con lo poco que hace y lo
que sus padres le regalan.
Entendí tantas cosas y ate muchos cabos. En una de nuestras conversaciones
yo le decía a él: - que no comprendía si había tenido tantas
novias, ninguna se había quedado, que la culpa la tenia él, que nosotras
no la teníamos, que el problema era él y que no se merecía ninguna de las
mujeres que había tenido. Finalicé diciéndole. NO ME MERECES, SOY MUCHA
MUJER PARA TI.
Cuando comenzamos la relación noté que ya había salido con otras antes,
que habían ido a su apartamento y cuando aún estaba con alguna de ellas,
trianguló conmigo, es decir, siempre reemplaza a una con otra, pero no la
suelta hasta que no tiene a una nueva victima en sus manos.
Todos estos días he repasado uno a uno nuestros diálogos, atando y atando
cabos y he caído en la cuenta de muchas cosas. Las señales existieron todo
el tiempo y no quise verlas. Desde ese primer día que me abordó en el
centro comercial, desde ahí todo comenzó mal. Él no vio en mi la
mujer maravillosa y estupenda que soy, él solo vio una victima más para
explotar sexualmente, emocionalmente y económicamente (aunque en esta
ultima le falló, yo no tenia el dinero que el requería para explotarme, aunque logró descuadrarme la billetera en mas de una ocasión y dejarme sin un peso).
Gracias a AMOR ZERO hoy puedo estar libre y tranquila de culpas, me duele haber
sido tan ingenua, me duele haber caído de esta manera, pero
también comprendí que fui una victima, no tuve a culpa de nada. No es el porqué me pasó, sino el para qué me pasó.
Y hoy lo entiendo y estoy tranquila. Me da lastima de esa pobre victima que
tiene ahora y las que vendrán, porque esto no va a parar nunca. Lo
único que puedo decir a su favor es que jamas me alzó la voz, jamás me trató
mal, jamás me golpeó, ni siquiera tuvo una mala palabra para mi, hasta en los
peores momentos que yo estaba llena de ira, nunca me ofendió. Pero su peor
pecado fue haber violado mi alma. Su abuso psicológico, emocional, su depredación. Con eso hizo lo peor que un ser humano le
puede hacer a otro.
Doy infinitas gracias a todos aquellos seres que de una u otra manera han
querido ayudarme a mi recuperación.
Vi todos los videos de varios canales y los del Dr Iñaqui Piñuel. Como Terapeuta Holística tengo estudios y certificaciones en varias técnicas, que he aplicado primero en mi y luego enseño a otras víctimas, hoy hago parte de un grupo de facilitadores, sobreviviente de estos depredadores, no me siento culpable ni responsable de nada, con los conocimientos y herramientas que tengo hoy, puedo ayudar a muchas personas y al mismo tiempo me fortalezco para no volver a caer en manos de ningún otro.
Agradezco a
Proyecto Alice en Youtube
Iñaqui Piñuel y su Comunidad Zero en Facebook
Sergio
Melchor y sus hermosos videos motivacionales
Walter
Riso y sus incontables herramientas
Y
tantos más que con sus vídeos, libros y consejos entraron en mi mente y corazón
para salir de esta.
Pero
especialmente al Dr. Iñaqui Piñuel, que sin este libro de AMOR ZERO,
sus vídeos, sus consejos, su terapia, yo estaría aun nadando en el mar de
la angustia, la incertidumbre, la culpa y el dolor.
Lo más importante de todo esto es que estoy recuperando mi matrimonio, al cual iba dejando a un lado, dándole una nueva oportunidad a mi matrimonio, con un hombre que siempre estuvo pendiente de mi y que yo no valoré. Hoy puedo decir que gracias a esta amarga experiencia, pude reconocer el hombre tan valioso que la divinidad me entregó como esposo y que yo estaba dejando ir por alguien que no vale la pena. Aprendí y aprendí mucho de esta pesadilla. Y eso finalmente es lo que vale, aprender y corregir. No volver a caer y de verdad ser feliz!!!
Firmo como:
Claudia
Victima
de Amor Zero
Email:
victimasdeamorzero@gmail.com
Colombia
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el libro, léelo, sánate y pídele a tu divinidad que te llene de sabiduría y
claridad para poder vivir este proceso de sanación.